Canon EOS M – «Be or not to be…»


Hace poco caí en la tentación de las mirrorless, las famosas CSC o EVIL, de la mano de Canon. Ya había trasteado con alguna Olympus Pen que Valentín Sama me había dejado probar y de entrada me parecían más atractivas estéticamente que una réflex gigante y negra como una cucaracha a las que estamos habituados. Pero además es que técnicamente las imágenes eran una pasada.

 

Cuando Canon lanzó su Canon EOS M se me pusieron los dientes como a Ronaldinho, pensando que todo mi sistema de objetivos EOS podía ser gratamente aprovechada por un sensor APS-C de una resolución más que aceptable.

 

De entrada y leyendo la reseña que el propio Valentín hizo en DSLR Magazine, necesitaba una excusa para comprarla, y coincidiendo con el cumpleaños de mi pareja, decidí regalársela (regalármela flojito) y trastear con ella (con la cámara, se entiende)

 

Las primeras impresiones fueron muy gratas; es cierto que no tenemos controles disociados de tiempo de exposición y apertura (aunque objetivamente son muy cómodos también) o echamos en falta el visor electrónico, o la opción de comprarlo a un precio lógico, nos encontramos con una cámara muy pequeña, ligera, bien construida, y algunos detalles, como la sujeción de la correa tipo Mamiya 645 realmente me parecieron un gran acierto.

 

La imagen es más que aceptable con el objetivo incluido, un 18-55 estabilizado y bien construido, aunque el enfoque no es muy bueno con él; sin embargo la imagen es realmente muy óptima con un objetivo en condiciones, a través del adaptador de EOS EF-M a EOS EF/EF-S, con el cual, además no hay ningún problema de enfoque ni automático ni manual. Si me apuráis, sólo hay una cosa que realmente me molesta más que las demás, y es que no tenga una clavija para disparador, y sólo funcione a través del mando a control remoto. Vale, estos mandos los hay desde 150 pesetillas en Internet, pero si te dedicas con cierta frecuencia a astrofotografía por ejemplo, lo puedes echar de menos desde el principio.

 

Hasta aquí todo bien. Todos seguimos con nuestras vidas, Canon vio quizás que el sector de las CSC era un mercado en el que quizás había entrado demasiado tarde, y en el que Olympus, Panasonic o Sony ya habían avanzado con firmeza e intentó corregirlo en primer lugar con la EOS M2, un modelo con la misma caja y el mismo sensor, y simplemente un par de detalles modificados, como la inclusión de conectividad Wi-Fi un segundo modo de disparo manual, y la salida de puertos en otro lugar. Eso sí, disponible en unos cuantos colores (recordemos el éxito entre los nipones de las posibilidades de mezclar colores en las cámaras de Pentax)

 

Daba la impresión de que Canon no había tenido tiempo de hacer los deberes y presentar un nuevo modelo de mirrorless y sólo un pequeño lavado de cara, tan desapercibida pasó que en España ni siquiera se comercializó; pero entonces apareció la M3.

 

Gracias a que mi amiguete Pedro Domínguez tiene una, pude hacer una comparación entre ambas unidades, la primera EOS M y la EOS M3.

EOS M - M3 - 5

A priori, diríamos que este es un modelo mejorado, más destinado a un sector profesional, que ya tiene un equipo réflex pesado y quiere otro más ligero para el día a día (yo me autoincluyo en este segmento). Hacen caso de la queja generalizada de que hubiera controles disociados para la apertura y el tiempo o una pantalla abatible como las Sony A7, y ciertamente, este modelo enfoca MUY bien, incluso con el objetivo del kit.

 

En principio sí han tomado nota de esas ‘sugerencias’ de los usuarios… ¿Gratis?

 

Tenemos una mayor sensación de agarre gracias a una pequeña prominencia que sugiere una empuñadura, y han cambiado la batería de una LP-e12 a una LP-e17, ligeramente más grande pero con menor rendimiento (dura realmente poco, es necesario una segunda o una tercera batería). El sensor tiene una resolución de 24 megapíxeles, bastante notable y equilibrado, y en esta ocasión incluye un flash retráctil similar a la Olympus PEN EPL1, que podemos disparar rebotado si lo sujetamos con el dedo.

EOS M - M3 - 4

En la parte superior tenemos un par de ruedas moleteadas, para elegir el programa de disparo como lo haríamos en una réflex de la gama EOS, y otra a mi parecer, absolutamente prescindible, para regular la compensación de la exposición en tres puntos por arriba y tres por abajo ¿Habría sido muy descabellado plantificar la misma rueda moleteada pero con un selector rápido de ISO?

 

En cualquier caso, parece que incorpora mejoras respecto a la primera caja ¿No?

EOS M - M3 - 3

Pues no exactamente, en mi opinión es sólo otro lavado de cara, una cámara ligeramente con mejor apariencia, que huye de la estética de las IXUS e intenta parecerse a sus hermanas mayores las EOS.

 

Perdemos el práctico enganche rápido de la correa y nos ponen el clásico pasador para una correa convencional, está vez exactamente la misma que podría llevar una gama baja como una 1200D. Mi gozo en un pozo.

EOS M - M3 - 1

Una vez trasladamos los raws al ordenador, el primer problema al tratarlos con Lightroom 5 es que no los reconoce. Normal, “no estarán incluidos en la versión del plugin de camera raw que tengo instalado” –me digo- y tras actualizarlo a la última versión… Sigue sin estar soportado. Necesitamos Lightroom 6 para tratar con estos archivos o convertir los CR2 que genera en archivos DNG.

EOS M - M3 - 2

Algo más grave es darme cuenta de que una vez importados estos archivos, me aparecen con el espacio de color sRGB, “será cosa de la conversión de archivos –me digo de nuevo- y podré modificarlo desde Lightroom o desde la cámara” ¿Os imagináis ya por dónde va la respuesta?

 

¡La cámara no tiene un espacio de color Adobe RGB! Sólo trabaja en sRGB incluso en el formato RAW, lo cual me hace plantearme que a pesar de pretender enganchar en este sistema CSC a un publico profesional habituado a determinados elementos como el ajuste de compensación de exposición, lo que Canon ofrece es un producto más destinado a aficionados que no saben qué es el espacio de color.

 

Personalmente, me quedo con la primera -ni siquiera con la segunda- versión de la Canon EOS M, un sistema que empezó muy bien, y que ha ido pinchando hasta el nuevo modelo del mismo, la M10, una versión que aglomera todas las desventajas de las anteriores… ¿Por qué me haces esto Canon?


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